Croissants perfectos
2 horas 55 min tiempo de cocción
Croissants perfectos
Modo cocción
Método
1
Pon la harina en el congelador durante, al menos, una hora.
2
Mezcla el agua y la leche y añade la levadura en una batidora. Añade el huevo, el azúcar y la sal a la mezcla y mézclalo todo. Añade la harina y remueve la mezcla durante 2 o 3 minutos hasta conseguir una masa firme.
3
Envuelve la masa en papel film transparente y ponla en el congelador durante 15 minutos.
4
Corta la mantequilla fría en rodajas y colócalas entre dos hojas de papel vegetal. Luego, forma un solo cuadrado de 15 × 15 cm y un grosor uniforme con la mantequilla.
5
Coloca la masa fría sobre una mesa espolvoreada con harina. Extiéndela hasta tener una pieza de 30 × 30 cm, coloca la mantequilla en el centro de la masa y dobla los extremos a su alrededor para que la mantequilla Lurpak® quede completamente rodeada por la masa. Pon la masa en la nevera durante 45 minutos y, pasado ese tiempo, estará fría y lista para extenderse.
6
Espolvorea harina sobre una mesa y extiende la masa hasta conseguir que mida unos 30 × 60 cm con 1 cm de grosor. Quita la harina sobrante de la masa, dobla un tercio de la masa hacia el medio y el otro tercio hacia la parte superior, de forma que la masa tenga 3 capas. Pon la masa en la nevera durante 30 minutos. Repite todo este paso 3 veces. Pon la masa en la nevera durante 30 minutos y, pasado ese tiempo, estará lista.
7
Extiende la masa hasta conseguir una pieza de aprox. 25 × 60 cm. Corta la masa en dos trozos de 12,5 × 60 cm. Corta cada pieza en 6 cuadrados, que luego se deberán cortar diagonalmente para formar 24 triángulos.
8
Enrolla la masa desde el borde ancho. Coloca los croissants en una bandeja de horno y déjalos subir durante, aproximadamente, 1-2 horas hasta que hayan duplicado su tamaño.
9
Unta los croissants con huevo. Hornea los croissants en un horno precalentado a 200 °C (180 °C con convección o nivel de gas 6) durante unos 15 minutos hasta que estén dorados. Enfría los croissants en una rejilla de enfriamiento.
La buena comida no tiene que ser perfecta. ¿Pero fue esta una receta ganadora para ti?