Pastas danesas
5 horas 25 min tiempo de cocción
Pastas danesas
Método
1
Pon la harina en el congelador durante, al menos, 1 hora.
2
Mezcla la levadura y el agua fría con una batidora. Luego, mezcla los huevos, el azúcar y la sal con agua. Añade la harina y remueve la mezcla durante 2 o 3 minutos hasta conseguir una masa firme.
3
Envuelve la masa en papel film transparente y ponla en el congelador durante 15 minutos.
4
Corta en rodajas la mantequilla Lurpak® fría y colócalas entre dos hojas de papel vegetal. Luego, forma un solo cuadrado de 15 × 15 cm y un grosor uniforme con la mantequilla.
5
Coloca la masa fría sobre una mesa espolvoreada con harina. Extiéndela hasta tener una pieza de 30 × 30 cm, coloca la mantequilla en el centro de la masa y dobla los extremos a su alrededor para que la mantequilla quede completamente rodeada por la masa. Pon la masa en la nevera durante 45 minutos y, pasado ese tiempo, estará fría y lista para extenderse.
6
Espolvorea harina sobre una mesa y extiende la masa hasta conseguir que mida unos 30 × 60 cm con 1 cm de grosor. Quita la harina sobrante de la masa, dobla un tercio de la masa hacia el medio y el otro tercio hacia la parte superior, de forma que la masa tenga 3 capas. Pon la masa en la nevera durante 30 minutos. Repite todo este paso una vez más y la masa estará lista.
7
Extiende la masa sobre una mesa espolvoreada con harina, forma una capa de ½ cm de grosor y córtala en cuadrados que midan, aproximadamente, 12 × 12 cm. Pon una pequeña cantidad de las mermeladas que hayas elegido en el centro de cada cuadrado y dobla las esquinas hacia el medio. Coloca las pastas en una bandeja de horno forrada con papel vegetal, píntalas con huevo y deja que crezcan durante 1 o 2 horas a temperatura ambiente.
8
Hornea hasta que estén doradas en un horno precalentado a 185 °C (165 °C con convección o nivel de gas 4). Deja que las pastas se enfríen en una rejilla.